Después del golpe que había significado la derrota en el partido de ida en el Monumental, River fue a Brasil con la esperanza de hacer un buen partido y revertir la serie ante el entonado Atlético Mineiro. Sin embargo, los brasileños no les dieron chances y liquidaron la historia para clasificarse a semifinales.
Con el esquema y los intérpretes que eligió, Marcelo Gallardo dejó en claro que pretendía un estilo de juego directo, sin demasiada circulación en el mediocampo y apostando a que los atacantes resuelvan en su zona de influencia.
Pero los dirigidos por Cuca demostraron que podían hacer mucho daño cuando recuperaban la pelota y aprovecharon al máximo los espacios que dejaba un Millonario descompensado en el retroceso.
En menos de 10 minutos, Eduardo Vargas en dos oportunidades y Matías Zaracho ya habían estado cerca de abrir el marcador, pero la impericia en la definición y las buenas intervenciones de Franco Armani lo impidieron.
Luego llegó un breve lapso de dominio de los argentinos y Matías Suárez con un remate desde la puerta del área exigió a Everson que respondió a la altura de las circunstancias.
Hasta que promediando la etapa inicial, Zaracho se filtró y recibió un centro del incontenible Hulk, ensayó una media chilena y estableció el 1-0. Más allá de un atisbo de reacción inmediata con un mano a mano que Everson le tapó a Julián Álvarez, a partir de que consiguió la ventaja, Mineiro ya manejó el encuentro a voluntad.
El Muñeco intentó equilibrar las líneas con el ingreso de José Paradela, pero el ex Gimnasia apenas estuvo unos segundos en cancha antes de que Hulk reciba entre los dos centrales, encare a Armani y la pique para ampliar el resultado.
En el complemento también entró Nicolás De La Cruz, quien llegó con lo justo desde lo físico por una molestia muscular, y con el transcurrir de los minutos otros hombres de vocación ofensiva como Jorge Carrascal y Federico Girotti. Ninguno de ellos pudo cambiar un trámite que ya estaba resuelto.
Tras otra desconcentración defensiva de la visita, Jefferson Savarino aprovechó para asistir a Zaracho. El ex Racing, de cabeza y desde adentro del área chica, desvió la pelota y redondeó una noche soñada para su equipo en Belo Horizonte.
El Galo sacó el pie del acelerador y hubo alguna chance aislada por lado hasta el final, pero ya no había mucho por modificar. Avanzó el que fue claramente superior en los 180 minutos y jugará frente a Palmeiras en la próxima fase.
Para River, ahora, quedará la Liga Profesional de Fútbol, el torneo local que se le viene negando a Gallardo y al que podrá abocarse de lleno en lo que resta de este 2021, para intentar volver fortalecido en la edición que viene al certamen continental.
Recomendados
Dólar tarjeta: desde hoy costará $1.360 por la eliminación del impuesto PAIS
Trump prometió «poner fin a la locura transgénero» a partir del primer día de su gobierno
Internaron de urgencia al doctor Alberto Cormillot y su esposa compartió un video sobre su estado de salud