¡Cuánto desahogo, por favor! Cuando parecía que la película tenía otra vez el final indeseado, el gol postrero de Angelini desató una locura en el Único. Este 3 a 2 ante Platense tiene que ser el punto de inflexión para un Central Cordoba que oxigenó su sangre. Llegó Septiembre y en el mes de la Primavera, el Ferroviario quiere florecer.
De Felippe, conociendo las urgencias, compuso un 4-4-1-1 rompiendo ese insólito mediocampo de tres números 5 que había puesto en Mendoza. Armó una zaga mas confiable entre Goñi y Canto, volvió Angelini al lateral izquierdo, Miloc y Pittón en el ombligo del campo, Farioli por derecha, Gamba por izquierda, de mediapunta el Pulga y la referencia en ataque fue el grandote Rangel. En los primeros 20 el equipo no dio pie con bola, Platense lo fagocitó con su presión asfixiante e impuso condiciones en el desarrollo.
El gol totalmente out of context de Rodríguez le permitió al conjunto santiagueño agarrar la manija del partido y pasar a dominar el mismo. La Pulga con pequeños destellos demostró que es el que mas entiende este juego. Gamba tiene un corazón gigante y Rangel se fue amigando con la pelota con el correr de los minutos (le falta ritmo futbolístico). El Ferroviario se fue al descanso con la ventaja mínima.
Sorpresivamente apareció Jourdan por Rangel en el complemento, cuando Sanabria pudo haber sido una buena opción. Gamba pasó a jugar de 9, el DT sacó al Pulga y Farioli, y tras una buena jugada colectiva Lucas Gamba metió el segundo. El elenco de Vicente López descontó rápido y otra vez a sufrir.
Tuvo el tercero Central, pero Rius cumplió la ley del ex y el 2 a 2 cayó como un lluvia de invierno en los espectadores que disfrutaban la noche primaveral. ¡Otra vez sopa! Cuando el Marrón se quedó con 10, el dueño de casa fue a buscarlo con impaciencia, pero vaya paradoja: el gol de Angelini llegó luego de una sucesión de pases criteriosos. El festejo alocado del lateral izquierdo también se replicó en las gradas.
Viene un parate que sirve para saborear el triunfo pero también para ir encontrando el equipo. El entrenador probó varios sistemas, con diversos intérpretes, pero ya es tiempo de darle cierta continuidad a una idea. Que el equipo sea mas previsible en cuanto a lo que pretende, no se puede ir corrigiendo a cada rato en los partidos. La racha negativa llegó a su fin (6 derrotas y un empate), ahora hay que aprovechar el envión.
Foto Prensa Central Cordoba
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