Hugo «Ñato» Roldán conquistó el título latino plata superligero del CMB

En la noche del viernes, el invicto Roldán (ahora 21-0-1, 7 KOs), N° 5 del ranking argentino superligero, se presentaba por segunda vez en el exterior y si bien superó a Del Castillo (10-2-2, 7 KOs), lo hizo con susto. Es que el colombiano envió al santiagueño dos veces a la lona, una en el segundo round y otra en el cuarto.

Más allá de que la segunda caída fue controversial -puesto que el golpe llegó después de la campana de finalizado el capítulo-, fue un claro llamado de atención. No obstante, el “Ñato” debió esmerarse y apeló a su velocidad y ritmo intenso para revertir la situación. Debido a esto, gran parte de la pelea estuvo bajo su control.

El colombiano se mostraba algo estático, por lo que el santiagueño trabajó desde la media distancia, entrando y saliendo, impactando suave al rostro con cruzados y ascendentes, que por momentos, eran más toques que aciertos profundos pero que eran suficientes para llevarse los capítulos.

Los problemas fueron más por aspectos propios que ajenos. Su guardia algo abierta y su permanente boxeo en velocidad, sumado a su liviandad sobre el ring, amenazaban contra su firmeza y le quitaban potencia a sus envíos. De todas formas, no mermó su accionar y más allá de los sustos, se llevó la merecida victoria.

Las tarjetas de los jueces fueron: Bolívar Arauz 94-94, Eliécer Pérez 96-92, y Jesús Alemán 96-92, ambas a favor de Roldán.

Suelto desde la primera campana, Roldán imprimió un ritmo intenso. Cambiando de guardia zurda a diestra, entró en la corta distancia donde filtró sus cruzados, y salió con pasos laterales. Pero su primer susto llegaría rápido. En el segundo round, Del Castillo aprovechó la guardia abierta de un argentino mal parado y conectó un preciso boleado zurdo a la sien, con que envió a Roldán a la lona. Si bien el santiagueño se mostraba recuperado, lucía algo acelerado. Su movilidad, por momentos, lo hacía estar más en el aire que afirmado en el tapiz. Por más que controló el tercero, no inquietaba demasiado. Así fue que en el final del cuarto, nuevamente con la guardia abierta del “Ñato”, Del Castillo dio dos pasos al frente y combinó su derecha e izquierda cruzadas al mentón, con que volvió a enviarlo al suelo. Si bien el golpe llegó después de la campana, el árbitro Héctor Afú realizó la cuenta.

En los capítulos siguientes, la tónica se mantuvo. Roldán, entre saltos, mostraba sus mejores recursos e impactaba tenues envíos. Frente a un colombiano estático, con poco se llevaba los rounds. El invicto conservó su control gracias a su velocidad de piernas, eludía los escasos arrestos del cafetero, y conectaba cruzados y ascendentes al mentón. Pero lejos estuvo de desbordar, y mucho menos, lastimar. Así, con escasa actividad, llegaron a la campana definitiva. Y tras ella, llegaría la decisión y el cinturón para el santiagueño.

A los 28 años, Roldán, que pesó 63,276 kg., consiguió su segundo triunfo en el extranjero luego de que en junio de 2019 doblegó al mexicano Carlos Jiménez en la ciudad de México. A esta actuación, llegaba de superar -siempre en fallo unánime- a Emiliano Domínguez, Saúl Huenchul y nuevamente a Domínguez en su última pelea, el pasado 17 de abril. Frente a Del Castillo (63,500 kg.), siete años menor, se adjudicó una trabajosa pero merecida victoria.