NO SE ANIMÓ

Central Cordoba perdió en La Bombonera 2 a 0 ante un Boca discreto, que tuvo en Zenón a su figura excluyente. Cuarta derrota en 5 partidos para el conjunto de Abel Balbo, que se hunde cada vez mas en la tabla de los promedios.

El Ferroviario se presentó con un 5-3-2, con la idea de resguardar inicialmente su propio arco, pero en la primera jugada profunda el elenco de Diego Martínez anotó. Janson lo dejó mano a mano a Zenón que definió muy bien, pero Merentiel le robó el gol. Eficacia suprema para Boca ante un Central que se descuidó muy temprano. Ante estos rivales no podés cometer errores porque la jerarquía pesa, y mucho.

Con otro rol a cuestas, el equipo santiagueño no encontró los caminos hacia Romero, jamás profundizó y le costó una enormidad verticalizar el juego. En el mediocampo no había jugadores con cambio se ritmo y la única apuesta era alguna guapeada de Monzón o Molina. Ese 1T tuvo como polémica un posible penal de Advíncula a Molina que los jugadores ferroviarios ni siquiera protestaron. Obviamente Lamolina se hizo el zonzo como perro que volteó la olla. ¿Y el VAR? Bien, gracias.

En el complemento Miloc pasó a la mitad de cancha tras el ingreso de Meli y la visita disputó con otra enjundia la tenencia. Tuvo un par de cabezazos de Monzón que atajó Chiquito Romero, pero siempre quedó la sensación que se respetaba demasiado al dueño de casa. Apareció nuevamente el iluminado Zenón para cerrar el resultado y en el último cuarto de hora Central fue mas por inercia que por convencimiento.

En lo previo perder en La Bombonera está dentro de la lógica, pero queda ese sabor amargo de haber perdido ante un Boca que no está en su mejor versión. La eficacia fue la clave dentro de un partido olvidable. Es momento de empezar a encontrar regularidad, tanto en el juego como en los resultados. Acostumbrarse a perder dejaría al equipo santiagueño en un callejón sin salida.

Foto Prensa Boca Juniors