Juventus pisó fuerte en Francia: goleó 3-0 al Nantes en el estadio La Beaujoire-Louis-Fonteneau por la vuelta de los 16avos de final y se metió en la próxima ronda de la UEFA Europa League: Ángel Di María convirtió los tres tantos del equipo italiano y fue la gran figura.
Un Fideo estelar. El campeón del mundo se puso el equipo al hombro, en el mejor y más literal sentido de la tradicional expresión futbolera. A priori, era un encuentro complicado para la Vecchia Signora, que como local había empatado 1-1 en la ida.
Pero Di María lo hizo fácil: a los 5 minutos del primer tiempo, recibió sobre la derecha en la puerta del área y definiendo de primera la clavó al ángulo con un sutil pero letal zurdazo. Luego, a los 20′, nuevamente el ex París Saint Germain aparecería para estirar la ventaja, esta vez de penal.
El propio Angelito había forzado la pena máxima: gambeteó a un defensor y definió, ante el rebote del arquero, le pegó de taco y el defensor Pallois la sacó con la mano, por lo que vio la roja. Remate cruzado, el Uno al otro palo. Gol. Y eso no es todo.
Ya en el complemento, a los 33′, Di María sentenció la historia y decretó su hat trick: capturó un rebote y de cabeza la mandó a guardar, aunque fue la tecnología quien le avisó al árbitro que la pelota había entrado.
A ocho minutos para el cierre, el rosarino dejó el campo, y en su lugar ingresó Leandro Paredes. Los juveniles argentinos Matías Soulé y Enzo Barrenechea fueron al banco pero no sumaron minutos.
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