La Liga Nacional de Fútbol Femenino de Estados Unidos (NWSL, por sus siglas en inglés) sigue envuelta en una bruma derivada de las denuncias de abusos sexuales que salieron a la luz en las últimas semanas contra Paul Riley, el ex entrenador de North Carolina Courage.
Este miércoles, las futbolistas de los distintos equipos que jugaron detuvieron el partido en forma de protesta tras conocerse los casos de abuso y luego de la suspensión de partidos que se produjo el pasado fin de semana.
A los 6 minutos de juego, en reconocimiento a los seis años desde que las ex jugadoras Sinead Farrelly y Meleana Shim realizaron sus denuncias, los encuentros se detuvieron y las jugadoras se juntaron en el círculo central, donde formaron una ronda tomándose de los brazos.
Riley fue despedido la semana pasada luego de ser denunciado por Farrelly y Shim, quienes lo acusaron de abuso sexual y comportamiento intimidatorio.
Ante la gravedad de la situación y las críticas por el mal manejo del caso, también fue despedida Lisa Barid, la ahora ex comisionada de la NWSL.
Recomendados
Catamarca: investigan la muerte de una docente y apuntan contra su ex pareja
[Audio] A diez años de Ni Una Menos: un grito que resuena contra la violencia machista
A 10 años del Ni Una Menos, se realiza este miércoles una multitudinaria marcha para «unir las luchas»