El Ministerio de Salud de la Nación, conducido por Mario Lugones, discontinuó este mes la compra y distribución de medicamentos para el cuidado paliativo de pacientes con cáncer en etapa terminal. La novedad se volvió viral este lunes, pero fue anticipada el 14 de febrero pasado por una referente del área.
«Noticia de primera fuente (yo misma): se ha desmantelado el Programa Nacional de Cuidados Paliativos del Instituto Nacional del Cancer, formador de recurso humano interdisciplinario en C.P. a través de becas en servicios de excelencia y cursos variados, provisión de morfina y metadona a las 24 jurisdicciones del país para apoyar principalmente el tratamiento del dolor severo por cancer en las provincias más pobres del país, asesoría y apoyo permanente a los equipos de cuidados paliativos de todo el país», escribió la médica Mariana Pechenik en su perfil de Facebook.
En la misma publicación la médica detalló los «actos» ordenados desde la administración de Javier Milei para ajustar no tanto a la casta sino a pacientes con cáncer que dependían de la Salud Pública para el alivio de su dolor.
Pechenik señaló el «recorte» como la causa principal por la que «se suspendieron las compras de opioides (morfina y metadona), se echaron a 6 de los 8 integrantes del equipo«.
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«Consecuencias: aumento de la prevalencia de cáncer, aumento de los padecimientos asociados a la enfermedad, más pacientes sin recibir atención de personal calificado en cuidados paliativos ni alivio del dolor«, expuso como corolario.
«El Instituto Nacional del Cáncer», explicó Pechenik, «estaba torciendo el camino de la ignorancia vergonzosa que tiene el sistema de Salud argentino en la materia», y articulaba su trabajo con el de la Asociación Argentina de Cuidados Paliativos y los institutos privados de formación.
«Esta política nacional es un descuido profundo a nuestros derechos humanos«, sentenció la médica al «informar desde adentro», antes de aclarar que «muchos no hablan por miedo».
Fuente Minutouno
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