Un enfoque claro sobre el impacto del recorte del Ejecutivo Nacional en el fútbol y los clubes de Santiago del Estero

Por el Dr Angel Nassif

Como hombre cercano al deporte y comprometido con su desarrollo en Santiago del Estero, no puedo dejar de expresar mi profunda preocupación y disconformidad con el drástico recorte presupuestario dispuesto por el Ejecutivo Nacional en el ámbito deportivo.

La reducción del 56% en términos reales del presupuesto asignado al deporte no solo compromete el presente de miles de atletas y clubes, sino que también pone en jaque el futuro del deporte en nuestro país. Santiago del Estero no es ajeno a este impacto. Con una fuerte tradición futbolística y un entramado de clubes barriales que funcionan como el corazón de la actividad social y deportiva, la falta de inversión pone en riesgo la continuidad de cientos de instituciones que dependen de estos fondos para subsistir.

Los Juegos Nacionales Evita, que han sido históricamente el semillero de grandes talentos, sufrirán una reducción del 65% en su presupuesto, lo que limitará el acceso de jóvenes deportistas a competencias nacionales y frenará el desarrollo de nuevos talentos en nuestra% provincia.

Además, la reducción del 87% en obras de infraestructura para clubes y el 77% en instalaciones de polideportivos condena a las instituciones locales a la precarización. ¿Cómo se supone que subsistirán los clubes de barrio sin apoyo estatal? Estos espacios no solo fomentan la práctica deportiva, sino que cumplen un rol social fundamental al alejar a niños y jóvenes de la calle y brindarles un entorno de contención.

Mientras la política deportiva parece estar enfocada en debatir sobre Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) y la hipotética llegada de la Fórmula 1, el deporte real, el que se juega en potreros, canchas de tierra y clubes de barrio, está siendo desmantelado. Tratar al deporte argentino como en otros países es un error conceptual grave. En Argentina, los clubes son mucho más que entidades deportivas: son instituciones sociales, educativas y culturales que forman ciudadanos antes que atletas.

Estimo debe reverse esta política de ajuste indiscriminado y se tomen medidas urgentes para garantizar el sostenimiento de los clubes y el acceso al deporte para todos. Sin inversión en deporte, no solo se pierden medallas, sino que se debilita el tejido social del país.

COMO AFECTARIA LA DESICION A NUESTRA PROVINCIA

La reducción del presupuesto deportivo tendrá un impacto profundo en Santiago del Estero, tanto en el fútbol profesional como en el amateur y barrial. Veamos algunas consecuencias directas y las posibles alternativas que podrían explorarse.

Impacto que causaria en Santiago del Estero,
Clubes de barrio y formación de jugadores

Retomando a lo expuesto respecto a la reducción del 87% en infraestructura para clubes, muchas instituciones pequeñas tendrán dificultades para mantener sus instalaciones.
La falta de fondos para material deportivo, entrenadores y torneos juveniles afectará la formación de futbolistas.
Esto generará una mayor brecha entre los clubes de Buenos Aires y los del interior, ya que en las grandes ciudades aún existen más recursos privados.
Equipos en torneos nacionales

Güemes y Mitre en la Primera Nacional (Nacional B) sufrirán el impacto en la logística de los viajes, ya que los costos de traslados son muy altos y sin apoyo estatal podrían quedar en desventaja frente a equipos con más recursos.

Central Córdoba en la Liga Profesional también se verá afectado. Aunque los derechos de televisión siguen existiendo, el recorte en infraestructura deportiva y apoyo a divisiones inferiores podría comprometer su desarrollo a largo plazo.

Ligas regionales y torneos locales
La Liga Santiagueña de Fútbol, que nuclea a muchos clubes locales, podría ver disminuidas las competencias debido a la falta de fondos.
Equipos de torneos federales como el Torneo Federal A y el Regional Amateur enfrentarán dificultades para sostener sus planteles y traslados

Buscar alternativas y posibles soluciones
Mayor inversión privada
Buscar patrocinadores locales o regionales que suplan en parte la falta de fondos públicos.
Generar acuerdos con empresas para sostener los viajes y la logística.
Autogestión de clubes
Crear proyectos de autofinanciamiento, como rifas, eventos y campañas de socios más activas.
Explorar modelos de cooperativas deportivas para mantener la actividad.
Presión política y gestiones provinciales

Que el Gobierno de Santiago del Estero gestione fondos propios o convenios con privados para sostener a los clubes más golpeados.
Replantear la distribución de los ingresos del fútbol, priorizando el desarrollo del interior.

Apoyo de la AFA
La AFA debería intervenir para evitar una desigualdad aún mayor entre los clubes del interior y los de Buenos Aires.
Rediscutir el reparto de derechos televisivos y fondos de desarrollo deportivo.
Si este escenario sigue sin cambios, los clubes del interior corren el riesgo de quedar relegados, lo que a largo plazo podría limitar la competitividad del fútbol argentino en su conjunto.