Convertido en las últimas horas en un jugador de peso en la guerra de Oriente Medio, el papa Francisco repitió este domingo las duras acusaciones de «crueldad» hacia Israel por los bombardeos en Gaza, un tema sobre el que había avanzado el sábado, y que mereció una severa respuesta del gobierno de Benjamin Netanyahu, que acusó al jefe de la Iglesia de «usar una doble vara» y no medir con la misma dureza que «los terroristas son los que usan como escudos humanos a esos niños».
La situación, para el siempre cauto lenguaje vaticano, es de una gravedad diplomática inusitada, y este domingo en el tradicional Angelus, cuando cerraba su mensaje, el Pontífice insistió en las severas acusaciones a la campaña de las fuerzas armadas que dirige Benjamin Netanyahu: «Con dolor pienso en Gaza, en tanta crueldad», enfatizó Francisco reiterando la palabra que había irritado al gobierno de Tel Aviv, para agregar «cuánta crueldad, los ametrallamientos contra niños, hasta los bombardeos de escuelas y hospitales…».
El sábado, Francisco había cuestionado severamente la muerte de siete niños de una misma familia en Gaza, anunciada la víspera por la Defensa Civil palestina. «Ayer [viernes] bombardearon a niños… No es la guerra, es una crueldad. Y quiero decirlo porque es algo que me conmueve», indicó el Pontífice en una audiencia con miembros de la Curia, el gobierno de la Santa Sede, afirmaciones indignaron a las autoridades israelíes.
«Los comentarios del papa son particularmente decepcionantes», sostuvo el gobierno de Netanyahu, considerando que esa postura vaticana «esta desconectada del contexto real y concreto de la lucha de Israel contra el terrorismo yihadista».
«Basta ya de doble vara y de señalar al Estado judío y a su pueblo», añadió la Cancillería judía, enfatizando que «la crueldad es que los terroristas se escondan detrás de niños mientras intentan asesinar a niños israelíes».
En ese contexto, la insistencia de este domingo de Francisco representa un nuevo paso en ese enfrentamiento, que muestran un claro cambio de tono del Pontífice, dejando de lado la habitual neutralidad política que busca guardar el Vaticano.
A finales de noviembre, el Papa había denunciado «la prepotencia del invasor» en Ucrania, luego de una posición en la que en los años de esa guerra nunca fue tan duro con Vladimir Putin como se muestra actualmente con las acciones militares judías, donde llegó a acusar a Israel de «hacer un uso inmoral de la fuerza en Líbano y Gaza».
Fuente Perfil
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