Tormenta Rafael podría reducir la producción de petróleo en Estados Unidos en 4 millones de barriles. Shell y Chevron evacúan parte del personal de plataformas offshore.
Según Reuters, la tormenta tropical Rafael, que podría intensificarse hasta alcanzar la categoría 2, amenaza la producción petrolera en el Golfo de México y podría interrumpir hasta 4 millones de barriles de petróleo esta semana. Earth Science Associates, una empresa de análisis energético, proyecta que el fenómeno podría afectar gravemente el suministro de hidrocarburos, con pérdidas de producción que oscilan entre 3,1 y 4,9 millones de barriles de crudo y entre 4.560 y 6.390 millones de pies cúbicos de gas natural.
Esto posicionaría a Rafael como la segunda tormenta más perjudicial de la temporada en alta mar, después del huracán Francine, que redujo el 42% de la producción de petróleo y el 52% de gas natural en sus días de mayor impacto.
Medidas preventivas
Shell y Chevron ya han comenzado la evacuación del personal no esencial de varias plataformas, como medida preventiva ante los pronósticos de que la tormenta aumente su fuerza a 100 millas por hora (161 kph) a mitad de la semana, según el Centro Nacional de Huracanes. Aunque Shell ha pausado algunas actividades de perforación, tanto Shell como Chevron han informado que, hasta el momento, la producción de petróleo y gas sigue operando con normalidad, sin interrupciones en el suministro.
Antecedentes
Los antecedentes históricos muestran que las tormentas y huracanes han impactado significativamente la producción de petróleo en el Golfo de México. Las mayores interrupciones se producen cuando la intensidad de las tormentas alcanza categorías altas, dañando la infraestructura y prolongando las interrupciones.
Un caso importante fue el huracán Ida en 2021, que afectó la producción de crudo en alta mar, provocando cortes de suministro que tomaron semanas en restaurarse. Según el informe de la Administración de Información Energética (EIA), durante este evento se suspendieron casi 1.7 millones de barriles diarios, y las instalaciones en alta mar quedaron sin operaciones hasta que pudieron repararse los daños estructurales.
Además, estudios de Enverus Intelligence Research en 2023 destacaron que, en un escenario de impacto medio de tormentas, cerca del 40% de la producción puede verse suspendida temporalmente, mientras que en escenarios más severos la interrupción alcanza el 90%.
Estas situaciones tienden a influir en los precios del petróleo, pero la capacidad de respuesta con liberaciones de reservas estratégicas puede mitigar parte de la volatilidad en el mercado.
Fuente: NA
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