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A juicio: atropelló, mató y podría ser condenado a 50 años de prisión

Gabriel Paco fue acusado de matar a tres personas cuando conducía ebrio. El joven escapó del lugar y ahora podría recibir una fuerte condena.
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La fiscal terminó la instrucción de la causa que tiene como único acusado a Rubén Gabriel Paco, por atropellar y matar a tres personas -entre ellas una nena de 6 años- en el departamento mendocino de San Carlos, y solicitó que sea elevada a juicio.

Paco, de 22 años, está acusado de atropellar y matar a tres mujeres el 19 de octubre cuando manejaba alcoholizado. Por el hecho fue acusado de homicidio simple con dolo eventual en tres hechos y si llega a ser encontrado culpable, podría ser condenado a 50 años de prisión. El joven permanece con prisión preventiva y se espera que en los próximos  meses comience el juicio.

Paco, además, cuenta con graves antecedentes que datan de 2017. Ese año fue detenido cuando cruzó un semáforo en rojo y escapó de un control policial cuando conducía una moto. En ese momento iba sin licencia de conducir ni seguro.

Un año más tarde, cuando iba a bordo de un furgón marca Mercedes Benz lo detuvieron por conducir sin seguro, licencia ni cédula. En 2018 atropelló a una mujer en el carril Nacional y calle Urzúa, causándole lesiones. En febrero del 2019 fue demorado por conducir alcoholizado.

Sin embargo, todos estos antecedentes no le impidieron seguir manejando y fue así que el 19 de octubre del 2020 mató a dos mujeres de 29 años y a una nena de 6. Ese día, Mariana Salinas y Romina Lazcano salieron a dar una vuelta en bicicleta junto los dos hijos de cada una. Mientras transitaban por la vieja ruta 40 fueron impactadas de atrás por un Peugeot 206. El auto chocó a las dos mujeres y a la pequeña hija de Lazcano, Loana, quienes quedaron tendidas en la calle. El conductor frenó unos metros más adelante, descendió del rodado y escapó corriendo hacia una finca. Pero con el número de patente y la declaración de los testigos, la Policía logró detenerlo en su casa ese mismo día.

El test de alcoholemia al que fue sometido demostró que conducía con 2.26 gramos de alcohol en sangre. Su estado era tan grave, que momentos antes un amigo había manejado el Peugeot porque Paco no estaba en condiciones.

Desde noviembre, la Justicia ordenó la prisión preventiva y lo imputó por homicidio simple con dolo eventual, un delito que contempla penas de hasta 50 años de prisión. Ahora, la investigación finalizó y la fiscal Viviana Crespillo solicitó que sea elevada a juicio.