Un niño de 2 años fue hospitalizado en Santa Fe por presentar síntomas de abstinencia por consumo crónico de cocaína. Si bien ingresó la semana pasada al hospital con convulsiones, su madre insistió en llevárselo, pero una denuncia policial obligó a que recibiera asistencia médica.
El hecho se conoció en las últimas horas y de acuerdo a los médicos, las consecuencias de la ingesta a tan corta edad genera problemas irreversibles, como retraso en el desarrollo y lesiones neurológicas.
El pequeño fue llevado por su madre al hospital de niños Orlando Alassia, de la ciudad de Santa Fe, debido a que sufría convulsiones. En el centro asistencial lo compensaron, pero constataron que en la orina había restos de cocaína. Los médicos creen que el niño debe haber tenido la ingesta por medio de la leche materna, es decir, que su madre es consumidora habitual de la droga.
En el momento en el que el niño fue compensado, su madre se lo llevó, pero debido a la gravísima situación y al peligro que representa para la salud del niño, los profesionales realizaron la denuncia policial y obligaron a que volviera al hospital.
Ahora es la Justicia la que interviene en el hecho y la encargada de decidir qué ocurrirá con el niño y su madre.
Por su parte, los médicos aseguraron que el síndrome de abstinencia en tan corta edad es muy poco frecuente y que suele verse en neonatología cuando son las madres las que consumen. En esos casos, en el momento en el que el bebé nace, sufre síndrome de abstinencia, un cuadro muy grave que puede llevar a la muerte.
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