Godoy Cruz sigue invicto desde la llegada de Diego Flores pero este viernes jugó su peor partido del ciclo. Empató sin goles ante un Central Córdoba que desde el primer minuto vino a buscar lo que finalmente se llevó del Malvinas Argentinas.
El duelo tuvo un primer tiempo chato, con situaciones aisladas y sin un claro dominador. Godoy Cruz intentó hacerse dueño del partido pero no terminó de descifrar el planteo visitante que esperó buscando sorprender de contra y lo hizo desperdiciando dos buenas oportunidades Primero en los pies de Mier y luego fue Martínez quien dilapidó la chance del equipo del Huevo Rondina.
Los mendocinos, poco podían hacer. Tenían la pelota pero sin saber que hacer con ella. Martín Ojeda estuvo lejos de su nivel, Valentín Burgoa no apareció y Tomás Badaloni se cansó de chocar con los defensores visitantes. La única destacada la tuvo Ojeda, que quiso picarla ante la salida del arquero aunque el ángulo era muy cerrado y no pudo lograr su cometido.
En el complemento, de movida, Flores puso en cancha a Ezequiel Bullaude para buscar más frescura en el ataque bodeguero y poder romper con una gambeta la firme defensa santiagueña. Tuvo algunos buenos momentos pero se fue perdiendo. Entonces mandó a Ramírez, Leyes y Cantero.
El partido seguía siendo pobre en cuanto a emociones y pasado los 35 minutos, Godoy Cruz contó con aproximaciones en los pies de Ojeda y Cantero. La visita movía el banco buscando sostener un punto de oro y el traductor se jugó la última fecha. Adentro Colman. Sin embargo, los minutos finales fueron más de lo mismo. Con un Tomba lanzado al ataque pero sin ideas para vencer la resistencia visitante.
Fue empate, un punto que sirve solamente para sumar teniendo en cuenta que en el juego estuvo lejos de la versión mostrada en partidos anteriores. Lo que se viene para el Expreso será Boca, en La Bombonera, y será una gran prueba de fuego para saber si este lapso fue solamente un envión anímico o está para mucho más.
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