El presidente del bloque Encuentro Federal de la Cámara de Diputados, Miguel Pichetto, mencionó una entrevista de Newsweek Argentina a Rafael Bielsa en medio de su discurso. “Entre lo sabía y lo engañaron hay unas cuantas paradas intermedias”, dijo el ex canciller en diálogo con el periodista Gabriel Michi.
De qué entrevista hablaba Miguel Pichetto en Diputados
Entre las preguntas referidas a la relación jefe-empleado de Bielsa con Milei, se destacan las siguientes:
¿Qué cosas ve reflejada en este Javier Milei presidente de lo que usted conoció de él en AA2000?
Con el correr de los días, el presidente exhibe cosas, y las concreta en el ejercicio de sus potestades, que yo no conocía. Usted puede decírseme que conocí mal, o que me faltó empatía. Es muy posible, ambas. Pero como las cosas que no veo reflejadas son muchas, y las que veo reflejadas son muy pocas y las peores, comprenderá por qué la respuesta es ínfima e irrelevante.
¿Cómo fue su experiencia en la Corporación América con Javier Milei? ¿Recuerda alguna anécdota?
Desde luego, recuerdo muchísimas. Pero las protagonizó una persona que ha dejado de existir. Razón por la cual no encuentro el sentido de hacerlas públicas. Estoy convencido de que no hay que olvidarse de lo que éramos frente a la brusca embestida de aquello en lo que nos hemos convertido. Cuando me vienen a la memoria, son como secuencias de teatro experimental, con ruptura de la cuarta pared. (Milei) no era un prócer, pero fue querible. No será ni una cosa, ni la otra. No será un asceta, ni un mártir, ni un convaleciente después de un intento de suicidio. Hay que estar muy maduro cuando se sueña con eso y se concretan esos sueños.
¿Qué piensa de todo el escándalo de la cripto moneda $Libra?
¿Qué quiere que piense? Se trata de un hecho vergonzoso, que debiera ser vergonzante. Todo lo sucedido tiene, desde luego, un sentido, aunque yo no pueda descifrarlo como quisiera.
¿Para usted, Milei sabía lo que estaba haciendo o lo engañaron?
– Entre “lo sabía” y “lo engañaron” hay unas cuantas paradas intermedias. Entre ellas, pasarse de vivo, creérsela. Un presidente puede no serlo, quiero decir, puede no ser vivo, pero no puede fingir que lo es si no lo es. Nunca hay que imaginar más de la cuenta. Adicionalmente, la honestidad o su falta no es exclusivamente una vinculación entre la conducta y el lujo. También se trata de decir la verdad, de ser sincero y de actuar con integridad en toda situación. Una persona honesta no engaña ni se aprovecha de los demás, y siempre intenta hacer lo correcto, incluso cuando nadie la está mirando. Lo que las leyes no prohíben, dijo Séneca, puede llegar a prohibirlo la honestidad. Por el rumbo del episodio de la moneda digital $Libra, sólo nos encaminamos a recordar a la honestidad como la mejor de las artes perdidas, dueña de la misteriosa certeza que da la muerte.
¿Qué consecuencias puede traer este escándalo?
Lo que es seguro es que, le guste al Gobierno o no, las cosas no serán las mismas que eran antes del último San Valentín. Sus logros serán más tácticos, y sus triunfos menos estratégicos.
Fuente NA
Recomendados
A 27 Años de su muerte: la vigencia del mensaje de Monseñor Gerardo Sueldo
Los edulcorantes artificiales podrían acelerar el deterioro cognitivo en menores de 60 años, según un estudio
Milei inició su viaje a Estados Unidos