El Real, la moneda brasileña, ya suma una pérdida de valor del 2,6% en lo que va de noviembre, y roza los R$6 por dólar. El mercado reaccionó de manera alarmante ayer 27 de noviembre, frente a la presentación de un paquete fiscal del gobierno de Lula da Silva, que promete recortar el gasto, sumar un impuesto a la riqueza y una suba del mínimo imponible.
Actualmente, el dólar se encuentra a R$5.99, lo que marca la desconfianza del mercado respecto a las reformas que presentó el ministro de Economía brasileño, Fernando Haddad.
El gobierno de Luiz Inácio “Lula” Da Silva anunció un fuerte recorte fiscal de unos US$ 11.800 para los próximos dos años, con la intención de convencer a los inversores sobre su compromiso por mantener en caja las cuentas públicas. Además, dispuso una baja de impuesto para sectores con salarios menores a US$ 800.
Tan sólo ayer miércoles 27 de noviembre, los bonos y acciones brasileñas cayeron, el Real se devaluó un 1,8%, y el banco J.P. Morgan bajó su recomendación de invertir en activos, resultando en un downgrave para con Brasil.
En este contexto, los inversores temen una caída de la recaudación y un aumento del déficit fiscal, razón por la cual comenzaron a vender acciones brasileñas y bonos de la deuda, lo cual resultó en una caída de 1,73% de la bolsa.
Qué impacto puede tener la devaluación del Real en la Argentina
Asimismo, estas medidas resultan también preocupante para el mercado argentino, debido al contraste cambiario con su principal socio comercial. En lo que va del año, el real acumula una depreciación superior al 19% frente al dólar estadounidense, pasando de 4,8407 reales por dólar en diciembre de 2023 a 5,7648 reales al cierre del viernes, según el Banco Central do Brasil.
Se estima que dicha caída complica las exportaciones argentinas a Brasil, lo cual se traduce como una pérdida de competitividad local.
«El hecho de que Brasil sea el principal socio comercial de la Argentina no es un dato menor. Un escenario de devaluación y de suba de la inflación impactará en el encarecimiento de los productos que nuestro país importa del gigante sudamericano», señalaron desde Wise Capital en su informe diario.
La fuerte devaluación del real genera inquietud en la Argentina en la medida en que abarata los precios en Brasil para los ciudadanos de naciones fronterizas, lo que podría acelerar un nuevo desvío de consumo hacia las zonas limítrofes, especialmente en regiones con conexiones terrestres.
Vale indicar que en el amplio contexto latinoamericano, las monedas locales sufrieron leves devaluaciones. Es el caso del peso mexicano, el sol peruano y el peso chileno, por tomar algunos ejemplos como referencia.
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